domingo, 22 de julio de 2018

Amor no es una historia de...


Pocas veces fui a teatro aun siendo un apasionado al arte y aun siendo actor. Hice teatro en su momento y hasta micros. Fui hasta profesor de teatro y dirigí en su momento. Vi pocas obras en la vida porque no me llamó la atención cosas metafóricas, abstractas y el ruido de los zapatos al caminar sobre el escenario, eso, especialmente, me molestó mucho.


Pero siempre hay un pero, en este caso una obra  que no me asombró mucho, pero que me dejó en silencio, cosa que nunca antes una obra de teatro me había dejado así, las otras me daban sueño. Amor no es una historia de lo mismo de siempre, va más allá, no es una historia de teatro, es más; es teatro, danza, audiovisuales y en algún momento pareciera que hay efectos visuales.
Empieza con una voz e imágenes proyectadas al frente, como si fuese cine. A partir de ahí la función inicia con un viaje de un poco más de una hora, pero parece de mucho menos tiempo. Proyecciones de escenarios interiores y exteriores, la luna siempre presente dando fuerza a Selene, la protagonista. El triángulo, en referencia al triángulo amoroso y solo hasta el final vemos el tema actual de la ideología de género, al menos, nos sentimos en ese medio. Un amor que no es una historia típica en el que hay ganadores y perdedores, aquí todos ganan gracias a su mente abierta, a su relación abierta. La danza mientras se da la proyección es algo que hay que ver, una pesadilla del personaje que dice todo, cuenta una historia de fondo como la escena del jacuzzi o el momento en que ellos piensan en silencio, no hay diálogo alguno, pero las proyecciones de ese instante nos dejan ver el subtexto de todo lo sucedido.

Amor no es una historia típica como culebrón Latino americano, es algo diferente. Todo es importante, tanto la actuación de los actores como la danza y las proyecciones, todo va ligado, unido, no se puede separar porque son uno solo. Es una obra que hay que vivirla, hay que sentirla para disfrutarla. Sus diálogos cuidadosamente escritos, sus movimientos están sigilosamente planeados, nada va al azar, todo tiene su razón incluyendo el texto y audios de las proyecciones.
Carolina Touceda, directota y actriz.

Carolina Touceda es la cabeza de esta obra y protagonista, Selene, sobre la que gira esta obra. Un personaje que lleva a la dificultad de la historia, a tal punto que es la causa de la decisión del hombre, aunque puedo estar equivocado y realmente la historia giraría en torno al amor.


Martina Belloni.

Martina Belloni, actriz de esta obra le da un toque distinto, pareciera ser la que perderá en esta obra, pero si vemos el final nos damos cuenta que estábamos equivocados. Su acento en las proyecciones da un toque interesante. Coreógrafa también participa de la danza en Amor no es una historia de…


Alex ortín.
Alex Ortín es quien padece la historia, todo le sucede a él y eso afecta al resto de los personajes. Tiene la difícil tarea de decidir. Su actuación es impecable y es potente cuando sale y canta tocando la guitarra.

Hay más integrantes de la obra que no se ven y vale la pena resaltar el trabajo de la iluminación y del encargado de las proyecciones. Lo cierto de todo radica en que Amor no es una historia de es una obra que hay que ver porque no es lo que estamos acostumbrados a ver.




sábado, 21 de julio de 2018

Olor a vagina.

Muchos hombres dicen que la vagina tiene olor a pescado. Es graciosa esa afirmación, ya que parece que quien lo dice jamás ha tenido una a centímetros de su rostro, pues ésta no tiene ese olor, es cierto que a veces huele mal, pero nunca a pescado. Me pregunto por qué lo dirán. ¿Acaso quieren hacer humor con este comentario? Una vagina no huele a nada, a veces tiene aroma agradable según perfumes, jabones u otros elementos de aseo personal e íntimo, pero no a pescado. ¿Acaso el pene no huele mal? Esos olores van desde el humor natural del cuerpo hasta a excrementos fecales, pero se equivocan al compararlo con pescado.

Conclusión: Quien dice que huele a animal marino nunca a hecho sexo oral ni ha tenido una en su cara y, en caso contrario, fue con una mujer cochina, desaseada y con algún problema con su higiene personal.

El pene y la vagina en estado normal no huelen mal  y cuando lo hacen no es a pez. A ver si estos hombres se dan cuenta de una vez por todas que cuando destila mal olor no es a este tipo de animal. Tanta burla y comentario intentando provocar risa sobre el olor de la zona íntima femenina y ninguna mención sobre el miembro viril. A ellos también les apesta en su momento.

Creo intuir que este tipo de comentarios los hacen repitiendo como loros lo que escucharon de otros. ¿Chiste, gracia, risa, humor? Para nada, solo me dan pena quienes hacen esta afirmación.